El pintor Juan Vallejo siempre fue un artista comprometido socialmente. Esto se plasmó en su arte, siendo un crítico feroz de la clase política burgalesa, siempre comprometido con la sociedad a través de sus creaciones. Esto le llevó a un exilio autoimpuesto en el que abandonó su ciudad natal tras la censura de una de sus obras en 1976.
A pesar de las desavenencias con la clase política burgalesa, años más tarde recibiría un encargo por parte del monasterio de San Pedro Cardeña, donde capturaría los silencios de la trascendencia en la bóveda de la escalinata imperial o varios trabajos para el monasterio benedictino de Santo Domingo de Silo. Aunque estuvo vetado de Burgos por motivos ideológicos, la ciudad terminaría acogiéndole y dándole el reconocimiento que merecía.
Tristemente, Juan Vallejo fallecía el 20 de noviembre del año pasado. Una perdida que dejo huérfana a la capital burgalesa de uno de los referentes internacionales del arte del siglo XX y XXI.
Esto domingo 14 de abril a las 12:00h, la Coordinadora Provincial por la Recuperación de la Memoria Histórica rendirá homenaje al pintor burgalés en la Plaza Nueva de Gamonal, en su barrio, detrás de la que fue su casa y junto al mural que se ha pintado en su honor.
En este acto, intervendrán miembros de la coordinadora y amigos del pintor. Además, se contará con la presencia de su familia. Al finalizar el acto, se inaugurará un placa que lucirá fuera de su casa en recuerdo al lugar donde nació y creció.