Ignacio Llamas presenta su nuevo montaje En el vacío, que se podrá visitar del 7 de noviembre de 2022 al 22 de enero de 2023 en el Centro de Arte Contemporáneo de Burgos (CAB).
Ignacio Llamas (Toledo, 1970) ha venido desarrollando una obra sostenida por la preocupación formal extrema y por un complejo contenido sensible. Una sensación de inmaterialidad, de ligereza, de sutilidad que ha acabado por envolver cada una de las propuestas que ha venido presentando en espacios y galerías de Europa, Asia y América.
Términos como mística, intimidad, introspección, silencio o subjetividad acompañan con frecuencia el relato de la obra de Llamas. En el proyecto que ha creado en exclusiva para el CAB elabora una nueva narración en su quehacer argumental: la identidad como noción ambigua, cada vez más alejada de la emancipación personal y colectiva y, por el contrario, más cercana a la exclusión y la dominación. El compendio de obras propuestas por Llamas respeta el rito poético y solemne que le es característico.
Las fotografías de la serie Lo que la luz encubre, resueltas unas sobre dominantes blancos, frente a otras de fondo negro, crean una retícula inquietante, entre el albor y la refulgencia, una atmósfera de apariencia vegetal cuya carga simbólica nos conduce hacia el borrado de la experiencia y el conocimiento. Un argumento que acentúa en obras como “Lo que se esconde en las sombras”, una refutación de la luz como fuente de discernimiento y un llamamiento a la meditación recogida.
La materialidad de Lo que se esconde en las sombras se evidencia de manera grave en Vaciamientos, una serie de cubos de cemento dispuestos en línea como una frontera insoslayable. El conjunto titulado Donde nadie quiere estar desnuda sus armazones para mostrar la inconsistencia de todo registro, la vacuidad del reconocimiento, la superficialidad de los discursos que arman nuestra identidad. Una reflexión que Ignacio Llamas resuelve de nuevo en una de sus piezas más elegantes y poéticas: Suspenderse en el vacío. Con ella regresa a la contundencia de la ruptura, del sacrificio que toda renuncia conlleva. La transparencia mellada del cristal conforma una sutil alegoría de nuestro envés más frágil, de nuestra existencia amenazada por el difícil equilibrio entre la construcción de un yo verdadero y auténtico y la necesidad de ser reconocido por el otro.
Javier del Campo, director del Centro de Arte Caja de Burgos
Ignacio Llamas
icenciado en Bellas Artes por la UCM, completó su formación con la participación en diversos talleres con artistas como Luís Gordillo, Misuo Miura, Jaime Lorente o Gerardo Aparicio.
A principios de los noventa realiza su primera exposición individual. Desde entonces muestra con asiduidad su obra en galerías, museos y centros de arte. Ha realizado exposiciones individuales y colectivas en España, Portugal, Italia, Alemania, Reino Unido, EEUU, Brasil y Argentina, participando con frecuencia en ferias de arte contemporáneo tanto nacionales como internacionales.
A mediados del 2002 su obra abandona el plano para adquirir un carácter volumétrico, siendo esta última de difícil clasificación, al encontrarse a caballo entre la escultura, la instalación y el objeto artístico. De ella cabe destacar su alta carga poética, mediante la cual profundiza en conceptos como la interioridad del ser humano y sus vinculaciones con la trascendencia.
Paralelamente a esta obra, y tras un largo periodo de acercamiento al mundo de la fotografía, surgen en 2009 sus primeras piezas fotográficas, que mantienen el espíritu evocador y místico de la obra en volumen. En los últimos años esta trabajando con el concepto del dolor y las posibilidades que este ofrece de, una vez asumido, construir al ser humano.